19 mar 2019

MARÍA BLASCO

Escribí este artículo sobre MARÍA BLASCO MARHUENDA  a finales del año pasado. Está publicado en la revista 100cias@uned nº11 (2018), en el apartado Semblanzas de Científicas y Científicos Españoles.


             https://contenido.uned.es/ciencias/revista/Maria_Blasco_Marhuenda.pdf


MARÍA A. BLASCO MARHUENDA 

María Blasco Marhuenda (Alicante, 1965), empezó a estudiar Biología en la Universidad de Valencia. En cuarto de carrera se trasladó a la Universidad Autónoma de Madrid,   para poder especializarse en Bioquímica y Biología Molecular, licenciándose en esta  especialidad en 1989.  En algunas entrevistas ha manifestado que su inclinación por la biología molecular fue una vocación tardía puesto que “quería ser ingeniera hasta que me hablaron de la biología molecular...”.  En 1993 obtuvo el título de doctora en Ciencias por su trabajo sobre una ADN polimerasa viral, trabajo realizado en el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa  del CSIC, Madrid, bajo la supervisión de  la Dra. Margarita Salas Falgueras. Este trabajo, tal como ella misma dice “hizo que me interesara por otra ADN polimerasa, esta vez de organismos eucariotas llamada telomerasa y que se había relacionado con  los procesos de cáncer y envejecimiento”. 
 Al finalizar su tesis doctoral María Blasco  se trasladó a EE.UU con una beca postdoctoral para  trabajar  con  la Dra. Carol Greider, ganadora junto a  Elizabeth Blackburn  del Premio Nobel de Medicina 2009,  en el Cold Spring Harbor Laboratory de Nueva York. Allí  inició sus estudios sobre cáncer y envejecimiento, consiguiendo aislar el  gen de la telomerasa y  obteniendo mediante ingeniería genética un ratón desprovisto de dicho gen. Estos  logros fueron publicados en la revista Science (1995). ´
 Tras su regreso a España en el año 1997, María Blasco se  incorporó al  Centro Nacional de Biotecnología del CSIC en Madrid. El grupo  de investigación  que dirigió es uno de los que más activamente ha contribuido a entender el papel de la telomerasa y de los telómeros en el cáncer y el envejecimiento. 
Desde 2003  trabaja en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), donde ha dirigido  el programa de Oncología Molecular y ha ocupado el puesto de vicedirectora de Investigación Básica. En junio de 2011  fue nombrada directora del CNIO en sustitución de Dr. Mariano Barbacid. A raíz de su experiencia en la dirección de este  centro María Blasco ha manifestado su opinión sobre el papel de las mujeres que rompen el techo de cristal  “He notado un doble rasero para juzgar a un hombre o a una mujer en el poder. Debido a los estereotipos, pero también al hecho de la posible amenaza que supone para un modelo hegemónico de poder masculino el que una mujer esté en un puesto de poder. Se nos ve muy bien como subdirectoras o vicepresidentas porque somos altamente productivas y resolutivas, otra cosa es tomar el mando…”.  
FIGURA 1

  Madre de un hijo  preadolescente, Ariel, María Blasco ha manifestado en numerosas ocasiones la necesidad de fomentar la conciliación familiar para evitar que la maternidad se convierta en un obstáculo para la carrera profesional de las mujeres científicas.  
Las investigaciones de María Blasco, iniciadas con el estudio de la existencia de la telomerasa, el acortamiento de los telómeros y su relación con el cáncer y el envejecimiento,  han continuado investigando como el desgaste de los  telómeros  aumenta la probabilidad de sufrir alguna de las enfermedades crónicas relacionadas con el envejecimiento tales como: anemia aplásica, fibrosis pulmonar, infarto de miocardio, además del  cáncer. En la actualidad  el campo de investigación  de María Blasco  y los equipos que dirige tienen como objetivo aplicar los conocimientos adquiridos, para conseguir prevenir y tratar más eficazmente dichas  enfermedades.
La importancia y trascendencia de su labor investigadora ha sido reconocida con numerosos premios y distinciones  de prestigio internacional, que ha ido recibiendo desde  prácticamente  el inicio de su carrera profesional. Una sucinta relación de todos ellos   podría ser la siguiente:  II Premio de Investigación en Oncología de la Fundación Echevarne (1999),  Premio Swiss Bridge Award 2000  de investigación en Cáncer (2000), Premio a la excelencia investigadora en biomedicina de la Fundación de Ciencias de la Salud (2001), Premio Josef Steiner de Investigación en Cáncer (2003), Premio Medalla de Oro  EMBO (European Molecular Biology Organitation) el año 2004, Premio Rey Jaime I a la investigación básica (2007), Premio Körber Ciencia europea (2008), Premio Nacional de Investigación Santiago Ramón y Cajal (2010), Académica correspondiente de la Real Academia  Española de Farmacia (2013), Doctora Honoris Causa por la universidad Carlos III de Madrid (2014), Premio de Investigación Miguel Catalán (2016), Doctora Honoris Causa por la Universidad de Alicante (2017) y  Doctora Honoris  Causa por la Universidad de Murcia (2018).
FIGURA 2

María Blasco es autora de más de doscientas publicaciones en revistas especializadas. Ha dirigido dieciséis tesis doctorales y ha participado en más de cuarenta proyectos de investigación,  desarrollados tanto en España como en el extranjero. 
En la actualidad los objetivos profesionales de María Blasco se pueden clasificar  en tres grandes   bloques: la labor investigadora al frente del CNIO, la divulgación científica de los conocimientos desarrollados y la lucha para vencer las dificultades que encuentran  las científicas en el desarrollo de su  vida profesional, al tiempo que fomentar la vocación científica en las chicas en el momento que tienen que elegir su futuro profesional.  
Respecto al  primero de los objetivos María Blasco ha conseguido que el CNIO se consolide como un centro de vanguardia en la investigación y la innovación, siendo el  segundo centro europeo y el quinto del mundo por sus investigaciones sobre el cáncer. El CNIO ha sido el primero en el desarrollo de estrategias terapéuticas para destruir el escudo protector de los telómeros, con el propósito de eliminar la ilimitada capacidad de división de las células cancerígenas pierdan su capacidad de ser inmortales.
El  CNIO, al igual que otros centros punteros de investigación como Yale o Harvard,   convierte sus descubrimientos en aplicaciones y obtiene  beneficios que revierten en el propio centro para conseguir una financiación que les facilite la labor investigadora. Con este fin  los grupos de investigación ceden sus patentes para que la industria farmacéutica se ocupe de su desarrollo como fármacos.
En el año 2010, María Blasco fue cofundadora de la empresa española de biotecnología Life Lenght, que ofrece como servicios la técnica de medición de la longitud telomerica  (TAT). Esta técnica fue desarrollada en el CNIO y cedida a Life Lenght para ponerla a disposición de empresas farmacéuticas, hospitales y laboratorios interesados en la medición de los telómeros, como indicadores de la edad biológica y del estado de salud del organismo. 
El segundo objetivo, la divulgación científica,  lo ha desarrollado tanto a  nivel personal como potenciando, la divulgación de las investigaciones, que se desarrollan en el CNIO. María Blasco, que imparte numerosas conferencias y concede muchas entrevistas a los medios de comunicación,  es además coautora  junto a la periodista Mónica G. Salomone  del  libro Morir joven, a los 140, publicado por la Editorial Paidós. Un ensayo apasionante que reflexiona sobre la edad, el envejecimiento y la muerte y como la ciencia ha descubierto que es posible alargar la esperanza de vida.
En cuanto al tercer objetivo, María Blasco es consciente de las dificultades que tienen las mujeres científicas, tanto por la existencia del techo de cristal que les impide muchas veces ocupar puestos directivos, ocupar cátedras, ser jefas de proyectos de investigación, etc. como por la dificultad de conseguir la conciliación de la vida familiar que permita  ejercer el derecho a la maternidad. Muy preocupada por las nuevas generaciones de científicas María Blasco ha declarado “A mí lo que me preocupa es cómo hacer para que haya más mujeres que den un paso adelante en cada momento de su carrera y no tengan  dificultades a la hora de cumplir sus sueños”.
  En relación con este tercer objetivo, desde 2012,  existe en el CNIO una oficina de mujeres y ciencia, se ha establecido la jornada continua y nunca se convocan reuniones después de las cuatro de la tarde.  
Además de su excelencia como investigadora María Blasco se declara amante de la historia, el cine,  el arte, la literatura y la música. Es lectora de la poeta y novelista Silvia Plath, le gusta el rock alternativo de P.J. Harvey y las guitarras eléctricas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario